Después de muchos años de servicio a sus parroquias y a la comunidad en general, el obispo concede la jubilación a los sacerdotes diocesanos; por lo general, esto ocurre mucho después de la edad común de 65 a 68 años. Durante la jubilación, si tienen la capacidad, la mayoría de sacerdotes jubilados continúa sirviendo en ministerios especiales y de socorro. Como sucede con todos nosotros algún día, la salud física del sacerdote puede comenzar a deteriorarse. En cierto momento, es posible que necesite un nivel más profundo de apoyo y atención que el que puede prestarse a sí mismo. Ese es el momento en que la “familia” da un paso adelante para encargarse de lo que es necesario. En la Diócesis de Oakland, esa persona es Carolyn Steele.
El ministerio de Carolyn en la Diócesis de Oakland es supervisar el cuidado de nuestros sacerdotes jubilados. En sus propias palabras, esto es lo que ella hace.
“Para empezar, ayudo a los sacerdotes durante la transición a la jubilación y los apoyo para que vivan de forma independiente el mayor tiempo posible. Me aseguro de que todos los sacerdotes tengan una directiva anticipada de atención médica y de que todos los documentos al final de la vida se elaboren y / o actualicen, incluidos los planes funerarios. A medida que cambian las necesidades, abogo por su necesidades de la mejor manera mientras están en el hospital o durante un cambio en su estado de salud; hago los arreglos relacionados con sus necesidades de atención post hospitalaria, evalúo las transiciones necesarias y facilito esas transiciones, como su ubicación en un centro de vivienda asistida / enfermería especializada y superviso el plan de atención para asegurarnos de que están recibiendo un nivel de atención adecuado. También los acompaño a las citas médicas cuando es necesario. En general, soy un apoyo disponible para ellos en sus años de jubilación. También mantengo informado al Vicario Sacerdotal y al Obispo sobre cualquier cambio que experimenten en su salud ”.
Es la época del año en la que se nos recuerda la necesidad y obligación que compartimos de apoyar a nuestros líderes parroquiales y comunitarios jubilados a través del Fondo de Jubilación de Sacerdotes. Por favor únase a las parroquias de la diócesis el fin de semana del 12 al 13 de septiembre de 2020, en la segunda colecta para apoyar este fondo fundamental. Su generosidad es una forma de agradecer y honrar a estos sacerdotes, que han dedicado su vida al servicio.
Los sacerdotes diocesanos juegan un papel importante en el trabajo de socorro y asistencia con sus compañeros sacerdotes, celebrando la misa y siendo llamados a servir cuando es necesario. Después de años de liderazgo parroquial, los sacerdotes jubilados no solo continúan sirviendo, sino que pueden disfrutar de una vida de oración, estudio y esfuerzos creativos.
Hay historias maravillosas de sacerdotes que trabajan en toda la Diócesis incluso después de su jubilación. Los sacerdotes jubilados llevan consigo relaciones de sus muchos años de ministerio. Por ejemplo, el reverendo Paul Vassar nos recuerda que “cuando usted ha circulado por mucho tiempo alrededor de la cuadra, ha hecho todas estas conexiones”. El llegó a apoyar a la Comunidad Católica de Pleasanton en 2019, después de la muerte del reverendo Paul Minnihan. La continuidad en su servicio sigue siendo importante para este grupo de católicos mayores. Monseñor Daniel Cardelli estaba ayudando durante su retiro en la parroquia de San Agustín, en Oakland, hasta que la pandemia golpeó. El antiguo párroco de la parroquia de San Isidoro, en Danville, continúa escribiendo artículos para el Bollettino y se desempeña como capellán nacional de la Federación Católica Italiana.
¿Esta usted dispuesto a ayudar a la Diócesis a apoyar estos sacerdotes jubilados a vivir una vida plena y activa? Para más historias sobre este grupo ejemplar e incondicional, visite The Catholic Voice en http://catholicvoiceoakland.org/2020/08-17/inthisissue8.htm
Nuestro objetivo es recaudar 250.000 dólares. Con su ayuda, podemos asegurarnos de que se satisfagan las necesidades de quienes han dado tanto a nuestra iglesia y la comunidad. Por favor apoye a estos hombres durante la segunda colecta del fin de semana del 12 al 13 de septiembre de 2020. Si desea donar en línea, vaya a este enlace y, para asignar una donación o contribución, seleccione Priest Retirement Second Collectiondel menú desplegable.
¡Gracias por su apoyo y que Dios bendiga a nuestros sacerdotes jubilados!
La Oficina para el Avance de la Misión
Cuando un sacerdote es ordenado en la Diócesis de Oakland, o en cualquier diócesis, se convierte en un miembro de la familia. Y como todas las familias, cuidamos unos de otros a lo largo de nuestra vida. Esto quiere decir en los buenos y malos tiempos, en buena salud y en enfermedad.